El faraón egipcio Tutankamón padeció de paladar hendido y un pie deforme, que probablemente lo obligaron a caminar con un bastón y murió por complicaciones de una pierna rota agravadas por el paludismo, según el estudio más extenso hecho jamás a su momia.
Las conclusiones se deben a dos años de exámenes de ADN y tomografías de 16 momias, incluso las de Tutankamón y su familia, dijo el equipo investigador en un artículo que publicará el miércoles la revista de la Asociación Médica Estadounidense.
Para conocer más